Fue el último heredero de una saga histórica, el superviviente que arrancó la tendencia de los móviles de pantalla grande y que se empeñó en mantener el stylus hasta el final. Sí, aún conservo mi Samsung Galaxy Note 20 Ultra, cuatro años hizo en septiembre. Y se actualiza casi más que mi Google Pixel 8 Pro.
No uso con demasiada frecuencia el Samsung Galaxy, siempre suelo tener algún otro teléfono por probar. Pero cuando vuelvo a encenderlo suelo encontrarme con una actualización: pese a que Samsung cerró el grifo de las versiones clave de Android, y que se quedó en Android 13 con One UI 5.1, al Note siguen llegándole puntualmente los parches de seguridad. Como decía, a menudo se actualiza antes que cualquiera de mis Google Pixel. Y qué decir del resto, son casi como la noche y el día.
Samsung sigue manteniendo en forma sus móviles antiguos. Siempre que sean de gama alta
Adquirí el teléfono en su lanzamiento y lo tuve más de un año como móvil personal. Después lo heredó mi mujer; que hizo del Samsung Galaxy Note 20 Ultra su smartphone preferido, especialmente por el S Pen. A partir del Note yo descarté las pantallas enormes, todo lo contrario que ella: tras jubilar este año el Samsung Galaxy, por su cumpleaños recibió un iPhone 15 Pro Max. Aunque de vez en cuando vuelve al Note cuando necesita escribir sobre el teléfono.
Dejando de lado las anécdotas familiares, confieso que me encantaría recibir la misma dedicación por las actualizaciones en los Android que no son ni Samsung ni Google Pixel. Es cierto que lo de Samsung tiene algo de trampa, ya que no reciben la misma atención los móviles de gama alta que los de gama media y accesible (poco a poco va mejorando). Sin que esto quite mérito al esfuerzo de actualización mensual, de capa y de Android que mantiene Samsung.
El Note 20 Ultra es un móvil que se mantiene en forma respecto a su hardware, no tanto en la cara del software. Alguna aplicación sufre ciertas ralentizaciones, tiende a calentarse en juegos de alta carga gráfica y la batería, pese a que sigue durando más de una jornada, ya comienza a notar cierto hastío. Aun así, es plenamente funcional a día de hoy. Y lleva cuatro años en pie.
Actualmente, acaba de recibir una de las últimas actualizaciones de seguridad liberadas por Samsung, la correspondiente a septiembre de 2024. El Note 20 Ultra se quedó fuera de la extensión a cuatro años de actualizaciones clave que introdujo la marca con los Samsung Galaxy S22 (y siete años con los Samsung Galaxy S24), por lo que Android 13 fue el final de la vía. Por suerte sigue existiendo una scene muy activa en torno al teléfono, podría instalarle una ROM. Aunque prefiero no vulnerar la seguridad de Knox, que jugar con las ROMs estropeó para siempre mi Samsung Galaxy Note 4.
Imagen de portada | Iván Linares
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