Todavía no se ha terminado y todavía quedan cosas por contar, pero lo cierto es que visto ya lo que hemos visto, si por algo vamos a recordar este Mobile World Congress 2016 va a ser por tres cosas: la llegada de los móviles modulares con el LG G5, la presentación de un esperado Samsung Galaxy S7 que llega para ensombrecer a la anterior generación de Samsung y una noticia bomba del gigante japonés Sony que ha pasado prácticamente inadvertida.
Sin hacer demasiado ruido, esperando al primer día de feria y lejos de eventos pomposos, casi con la boca pequeña, Sony despedía en este MWC 2016 a una gama Xperia Z que capitaneó con éxito el aterrizaje de la firma japonesa en el mercado de smartphones.
Los nuevos smartphones Xperia X tienen la culpa, rescatando una denominación casi olvidada desde el final de la aventura de Sony Ericsson, y que ahora se convertirá en la nueva referencia de los smartphones Xperia:
Es el fin de la gama Z. Es un nuevo capítulo. Lo que representa la X es la inteligencia y las características de Xperia de lo mejor de Sony.
Anthony Barounas, Vicepresidente de Sony Mobile
No ha sido fácil que Sony confirmase la desaparición de la gama Xperia Z como su tope de catálogo, de hecho nosotros mismos especulábamos con esta posibilidad antes de reunirnos con el Vicepresidente de Sony Mobile, Anthony Barounas, para una entrevista que ha dejado un par de titulares muy interesantes.
El primero de ellos el que ya hemos comentado, que Sony apuesta por el fin de la gama Z para abrir un nuevo capítulo con los Xperia X, un renovarse o morir que centrará sus esfuerzos en los dispositivos inteligentes. Por ejemplo, es inevitable pensar en la película 'Her' mientras leemos las posibilidades de su nuevo auricular Xperia Ear.
Sony lo tiene muy claro, el futuro está en el Internet de las Cosas (IoT), y aunque este mercado de aparatos, muebles y cosas conectadas todavía está naciendo, todos tenemos claro que cambiará la electrónica de consumo para siempre al igual que nuestros hábitos.
Ahí estará Sony, creciendo con las nuevas necesidades. Una Sony que ayer recordaba con orgullos el haber estrenado hace 9 años el mercado de los smartwatches, cuando nadie se creía aún que pocos años después veríamos hasta neveras, lavadoras o coches conectados.
¿Qué nos deja la gama Xperia Z?
Pues sí, hace sólo 3 años que los Xperia Z están entre nosotros, y con ellos llegaba una nueva filosofía de diseño que Sony vino a llamar OmniBalance, con un smartphone totalmente recubierto de cristal cuando prácticamente todos usaban plástico.
Sin embargo, la sorpresa mayúscula de aquel Mobile World Congress 2013 estaba escondida bajo el agua de una piscina, donde el Xperia Z aguantaba estoicamente encendido mientras la prensa de medio mundo observaba ojiplática.
La carrera de Sony ha sido meteórica, quizás porque era el único fabricante empeñado en estrenar un nuevo tope de gama cada seis meses, pero también porque mejorar lo bueno es una seña de identidad del fabricante japonés, y el culto al detalle es algo que Sony siempre se ha permitido.
El pasado septiembre se presentaba en Berlín el último exponente de los Xperia Z, en tres sabores y subiendo la apuesta por la gama alta con una versión 'Z5 Premium' que se atrevió incluso a irse hasta la resolución 4K por primera vez en un teléfono móvil. Era el paso que todos pedíamos a Sony.
Sin embargo, a la gama Xperia Z debemos agradecerle otras cosas, entre ellas el gusto por los acabados, ahora que tan de moda están los smartphones con diseño, materiales y construcción premium. Sony ya había trabajo desde siempre con un nivel de detalle altísimo en el acabado de sus Xperia, y el cuidado por los detalles es algo que los demás han tenido que apuntarse.
No sólo eso, pues aunque Sony no hubiese inventado los dispositivos resistentes al agua, lo cierto es que su gama Xperia Z no ha dejado de apostar por una característica que muchos agradecen, y que incluso Samsung ha recuperado este año para su Galaxy S7.
Los apartados multimedia son el otro aspecto básico de la gama Xperia, con los apreciados sensores Exmor RS a la cabeza, Sony fue la primera en empeñarse en el sonido de alta calidad con su ClearAudio y el reproducto Walkman, y también una pionera en mirar a los juegos móviles como un negocio de futuro con su PlayStation Certified.
Obviamente ha habido equivocaciones, pero nadie es perfecto y el nivel alcanzado hoy por hoy por el gigante japonés es muy alto. Por ello, no nos extraña la apuesta por el cambio de rumbo para optimizar el trabajo hecho y aplicarlo a una nueva gama que innove desde una herencia exitosa.
De momento, quieren que el Xperia Z Perfomance comande su nueva era manteniendo el diseño OmniBalance elegante y simétrico, la resistencia al agua y un tamaño comedido con el mejor hardware disponible, pero veremos si en los próximos meses nos sorprenden con un buque insignia más rompedor.
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