No te voy a engañar, me encantaría tener Android Auto en mi coche. El problema es que, aunque tiene unos añitos a sus espaldas, mi coche sigue genial con un motor que no ha dado problemas y unas prestaciones que cumplen lo que necesito.
Claro que me gustaría tener el sistema de Google integrado en mi coche, pero no voy a cambiar sólo por eso. Lo que sí puedo hacer es convertir mi móvil en un sustituto de Android Auto. Te voy a contar cómo lo hago y, además, un último truco para hacer que una tablet Android tenga Andrroid Auto.
Lo primero es el soporte (y esto sí te va a costar dinero)
Si ya tienes un soporte, puedes saltarte este punto, pero evidentemente necesitarás un soporte para poder utilizar el móvil correctamente en el coche. Es evidente que aquí tendrás que invertir un poco porque no puedes ponerlo en el salpicadero sin soporte, pero realmente tienes un montón de opciones para colocar el móvil en el coche.
Los que más me gustan son los que se colocan en las rejillas del aire acondicionado, ya que están en un punto muy visible, pero no estorban en absoluto a la hora de prestar atención a lo importante, que es la carretera. Los hay de apenas 10 euros, que son los más genéricos y funcionan genial, pero también hay otros más, pero que aportan un punto diferente a la experiencia.
Por ejemplo, yo tengo este de ESR que cuesta unos 36 euros y que sí, está penado para iPhone, pero puedes usar perfectamente con un Android siempre que hayas acondicionado tu teléfono convirtiendo su funda en compatible con MagSafe. Es algo muy sencillo, económico y este soporte no sólo permite tener el soporte como tal, sino que carga el móvil.
Hay una versión con refrigeración activa que es algo más cara, pero creo que no tiene sentido. En invierno no hace falta disipación y en verano tienes el aire acondicionado, así que no pagaría de más sólo por el ventilador integrado en el soporte.
Aplicaciones que simulan un dashboard de coche
Visto el requisito imprescindible para poder colocar el móvil en el coche, vamos con mi primera solución a la hora de utilizar el smartphone como sustituto de Android Auto. Y es que, hay varias aplicaciones que simulan no ya Android Auto, sino algo similar a una interfaz de infoentretenimiento de un vehículo.
La que he estado probando estos últimos meses es Car Launcher y, aunque tiene versión de pago, no me parece que sus beneficios merezcan la pena y llevo muchos viajes utilizando simplemente la versión gratuita.
Car Launcher no es una imitación de Android Auto, sino una interfaz completamente distinta en la que tenemos todas las aplicaciones que tenemos instaladas en el móvil. Podemos seleccionar una serie de accesos directos a las apps más importantes y yo lo tengo a Google Maps, Calendar, Waze, Telegram, Apple Music y YouTube.
Tienes varias skins disponibles, algunas con un diseño más clásico y otras más modernas en las que tienes un velocímetro (que bebe de Google Maps, claro), pero como digo, con la versión gratuita es más que suficiente. Es una interfaz muy enfocada a la conducción y, como digo, llevo meses probándola y me parece muy estable.
¿Qué tal un launcher minimalista?
Si no quieres aplicaciones, sino dar un nuevo aspecto a tu móvil, siempre tienes la opción de instalar un launcher. Hay multitud de ellos, pero uno que he usado durante meses enfocado a la conducción es Niagara.
Es de sobra conocido, por lo que tampoco necesita explicación, pero lo que permite que sea un launcher genial para colocarlo en el soporte del coche es que tiene orientación tanto vertical como horizontal y puedes poner como destacadas las apps que quieras.
En ese caso, sólo aparecen esas apps destacadas en la pantalla principal y no tenemos que estar buscando por el cajón de aplicaciones. Las distracciones son mínimas y no tienes que abrir ninguna app cuando te montes en el coche, ya que no deja de ser tu launcher del día a día.
Aprovecha el doble escritorio de Android (si lo tiene)
Vale, te gusta la idea de tener apps destacadas enfocadas a la conducción, pero no quieres optar por un launcher porque te gusta el aspecto del que tienes por defecto en tu móvil. La solución en este caso son los dobles espacios.
Puede ser un doble espacio si tu capa de personalización lo permite o puedes crear un segundo usuario en Android para que, en esa segunda cuenta, sólo tengas los iconos de las aplicaciones que puedes usar en el coche.
Cuando te montes en el coche, entra en el segundo espacio o en el usuario generado específicamente para el coche y listo.
O convierte una vieja tablet en un Android Auto de verdad
Ya te he contado mis tres maneras de convertir mi móvil en un sustituto de Android Auto, pero hay un modo de convertir, por ejemplo, una tablet en un Android Auto completamente funcional.
Gracias a Headunit Reloaded Emulator, podemos convertir un dispositivo Android en un Android Auto. No sólo tenemos la misma interfaz, sino que nuestro móvil piensa que se ha conectado a un genuino Android Auto. Sin duda alguna, es mi herramienta favorita para tener Android Auto sin tener un coche preparado para ello.
¿El problema? Es una aplicación de pago. Cuesta unos cinco euros, pero si tienes claro que vas a sacarle partido, vale cada céntimo. Así que, si estás en una situación como la mía con un coche que va bien, pero quieres Android Auto, ahí tienes cuatro alternativas.
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