Temple Toad, salta todo lo que puedas para intentar escapar de un templo infinito

Los endless run (aquellos juegos donde corremos sin fin con el objetivo de llegar lo más lejos posible) ya son un género en sí mismo y en los móviles han logrado encontrar un hueco. Hay escenarios y propuestas de todo tipo y ahora nos toca una nueva vuelta de rosca donde nos pondremos en el papel de una rana aventurera que tiene como misión escapar de un templo maldito.

Temple Toad es su nombre y, como en otros juegos de este estilo, tendremos que avanzar todo lo que podamos esquivando trampas varias y saltando por plataformas de todo tipo. Parece sencillo pero no os dejéis engañar por sus gráficos retro porque es uno de los endless run más complicado que he jugado y también uno de los más adictivos.

Todavía más difícil que Flappy Bird

Con una rana de protagonista, os podéis imaginar que el juego va de saltos pero, ojo, los brincos están controlados para que el control sea más sencillo (tan solo tenemos que pulsar un botón) pero donde atinar con el momento exacto es fundamental. Cuando estamos en reposo nos aparecerá un arco que se irá moviendo de más lejos a más cerca. Según el momento en el que pulsemos nuestro protagonista saltará a ese punto.

Llegados a este punto seguro que estaréis pensando que lo que más nos convendrá siempre es que salte lo más lejos posible. Craso error: a veces necesitaremos hacer pequeños saltos para colocarnos mejor y luego poder hacer uno más largo y no terminar golpeándonos en la cornisa por no haber tenido suficiente distancia de salto antes de colocarnos.

Según avancemos más el escenario se irá complicando con plataformas más estrechas, paneles móviles y proyectiles que intentarán eliminarlos. Por supuesto, tenemos que movernos rápido ya que si nos quedamos parados un muro con pinchos nos intentará ensartar. Por el camino, tenemos que coger todas las gemas que podamos para luego invertirlas en sombreros con los que personalizar a nuestra rana.

La mecánica es muy sencilla y engancha con facilidad. Sin embargo, es un juego complicado al que tendremos que echarle mucha práctica si queremos conseguir puntuaciones altas. Visualmente el juego está hecho con mucho mimo y es inevitable sentirse atraído por ese toque reto. Es gratuito y se basa en un free to play para comprar gemas.

La única pega que le pongo a Temple Toad es la pésima integración de los anuncios. Siempre tendremos un banner en la parte inferior y cada tres o cuatro rondas nos saldrá un anuncio a pantalla completa durante cinco segundos, es bastante intrusiva. Podemos eliminarlos pagando dos euros pero si queremos más joyas, nos tocará pasar por caja igualmente.